La crisis es una oportunidad para crecer y hacernos fuertes

[block_quote quote = ‘1|0’]«La crisis es una oportunidad para crecer y hacernos fuertes»[/block_quote]

Entrevista en HOY, Diario de Extremadura (17/02/2014)

Fernando Sarráis, Especialista en Psiquiatría de la Clínica Universitaria de Navarra.
Autor del libro ‘Madurez psicológica y felicidad’, defiende la necesidad de poner al mal tiempo buena cara para ser feliz

:: ANA B. HERNÁNDEZ, PLASENCIA. Quizás haya muchas personas que no crean o a quienes les resulte difícil creer que la manida crisis económica que sufre el país desde hace más de cinco años tenga un lado positivo. Pero es así, según el doctor Fernando Sarráis (Mérida, 1958). Mantiene que la crisis no ha generado ni restado más felices ni infelices. Todo depende del interior de las personas. Este especialista en Psiquiatría en la Clínica Universitaria de Navarra y profesor de Psicopatología de la Educación y Psicología Social en la Universidad de Navarra, rompe mitos en su quinto libro ‘Madurez psicológica y felicidad’ (EUNSA).

–Salud, dinero y amor, ¿no son sinónimos de felicidad?

–No. Para ser feliz hay que tener madurez psicológica.

–¿Qué significa?

–Significa funcionar como un ser humano, con razón y libertad. Si se actúa así, se es feliz.

–¿Qué dificulta esa actuación?

–Las emociones negativas: el miedo, la ira, la vergüenza, el sentimiento de culpa, el de inferioridad,…

–¿Por qué?

–Porque la persona se siente mal por estos sentimientos y actúa para aliviarlos, pero entonces no actúa en función de la razón y la libertad.

–¿Cómo se consigue actuar en función de la razón y la libertad?

–Como todo en la vida, peleando por ello. La gente se esfuerza mucho por tener un cuerpo diez o tener mucho éxito profesional, por ejemplo. Pero no se esfuerza para tener una personalidad diez, una situación afectiva diez.

–Dice en su libro que el camino hacia esa plenitud está en saber sufrir.

–Hay que aprender a sufrir, saber mantener la calma ante cualquier problema o contrariedad, no puede ser que te amargue el que va detrás con el coche porque te pita, por ejemplo. No quejas, no lamentos, no tristezas, no enfados por dentro cuando se sufre venga de donde venga ese sufrimiento; no se pueden perder la paz y la alegría.

–Se necesita autocontrol.

–Se necesita tener dominio emocional sobre uno mismo, porque si no, no se es libre, sino una veleta. Llama la atención que en una sociedad en la que se habla tanto de libertad no se lucha sin embargo por ella y, por eso, hay tantas adicciones, montones de esclavos.

–¿Por qué se busca el bienestar inmediato?

–Porque se busca el alivio inmediato para saldar todos los sentimientos negativos en lugar del equilibrio entre la cabeza y el corazón, y es sin embargo esta armonía la que hace que uno sea feliz.

–¿Cómo sabe una persona que es madura psicológicamente?

–Cuando funciona con la razón, cuando hace las cosas porque le da la gana.

–¿Las vivencias no marcan la actitud ante los problemas?

–No, las vivencias marcan en función de cómo se llevan. Dos personas enfermas no lo llevan igual, dos personas en paro, tampoco. La vida es dura, muy dura; es un valle de lágrimas, no es un paraíso, y hay que saber llevarla.

–La vida no es igual para todo el mundo. No es igual para quien tiene trabajo que para el que no tiene, ni es igual para quien padece una enfermedad que para el que está sano.

–Hay quien tiene millones pero es avaro y sufre cuando se gasta un euro; hay quien no tiene coche y es feliz y quien tiene tres pero necesita cuatro; hay quien se siente seguro y quien tiene miedo y no consigue ser feliz a pesar de tener la casa llena de cámaras y contar con vigilantes.

–No depende de lo que se tiene.

–Depende de la actitud ante la vida. Ser feliz no depende del exterior, del mundo, sino del interior de uno mismo. Quien depende del mundo es un sujeto pasivo.

–¿La crisis entonces no ha generado más infelices?

–La crisis es una oportunidad para crecer y hacernos más fuertes. Las dificultades son un reto, una oportunidad para mejorar porque lo fácil es bajar cuestas no subirlas.

–¿Hay diferencias entre comunidades autónomas?

–Las hay si hay diferencias culturales o patrones educativos distintos. Por ejempo, las zonas del sur viven en general con más calma, disfrutan, dedican más tiempo a charlar; en el norte, sin embargo, prima más el trabajo y el éxito… Pero todo depende de la persona, hay que tener claro que el protagonismo no está en el mundo, en el exterior, sino en el interior de cada uno.

–¿El aprendizaje debe iniciarse en la infancia?

–Desde pequeño, claro. En la escuela damos mucha importancia a las asignaturas, pero no se ponen las bases para lograr la armonía entre razón y libertad; aun así todos los días hay oportunidades para ello, para no dejarse robar la paz y la alegría. Para aprender a sufrir, para saber poner al mal tiempo buena cara.